LO DICHO ''YES, WE JARL''

lunes, 21 de marzo de 2011

Napoleón Solo y Plastic Frostik Machine en la Caja Blanca



Volvíamos a la Caja Blanca, y volvíamos al Wild Weekend. Y es que hacía tiempo que no se nos presentaba la ocasión de ir a alguno de los conciertos organizados. Que mejor noche para volver que la pasada noche del viernes en la Caja Blanca. La noche 'granadina' se las prometía. Los primeros en abrir fuego fueron los aún no muy conocidos Plastic Frostik Machine. Y digo aún, porque ya los conocerán y no tardarán mucho en hacerlo. El grupo, conformado por músicos experimentados de la escena granadina, ya tiene casi preparado su primer EP que verá la luz muy pronto. Mientras tanto siguen descargando energía sobre los escenarios, cómo hicieron el pasado viernes en un concierto con el que dejaron a más de uno asombrado. A pesar de no ser cabeza de cartel, todas las personas que iban entrando al concierto se iban impregnando del ambiente bailable y guitarrero que demostraban los Plastic Frostik Machine. Hicieron un repleto de canciones en inglés que hicieron a los presentes mover la cabeza y algunas partes del cuerpo. Para terminar el sexteto hizo subir a la cantante Mónica Navarro para hacer una versión del tema 'What is love' muy buena, aunque tal vez bastante parecida a la original. En fin, una gran apertura para los Napoleón Solo en manos de un grupo que en los próximos meses seguro dará mucho que hablar.





Si con los Plastic Frostik Machine el recinto de la Caja Blanca estaba casi lleno, cuando atronaron los primeros acordes y los primeros falsetes de Alonso la Caja Blanca ya estaba repleta y expectante por ver a uno de los grupos revelación de los últimos años. El grupo puso mucho de su parte y se entregó al público malagueño, que era la primera vez que los veía. Tocaron su primer disco entero, y muchas de las canciones más famosas fueron coreadas por el público. Además nos hicieron un pequeño adelanto de lo que será su segundo trabajo, que tiene vistas de seguir bastante la línea del primero. Casi hora y media estuvieron sobre las tablas de la Caja Blanca con un final apoteósico y lleno de fuerza. La única pega del concierto fue el sonido un tanto deficiente, que a veces nos impidió escuchar la voz de Alonso.

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