Maika Makovski+Depedro+Ilegales

Fin de semana de conciertos en Málaga
Maika Makovski
Lo de esta señorita no es normal. Los que el jueves tuvieron la ocasión de ver a Maika Makovski en el teatro Cánovas pueden afirmarlo. Con puntualidad alemana empezaba el concierto a las 9. Maika, acompañada de sus Makovskian (Javier Luque al bajo, Oskar Benas a la guitarra, y David… a la percusión) nos ofrecerían una hora de rock sin contemplaciones. Clase, potencia, fuerza, elegancia (ayudadme con los adjetivos) todo aunado para sonar como si fueran una banda que lleva 1000 años tocando. La cantante mallorquina encandiló desde el primer momento a los asistentes, algo que culminó con la representación en solitario de una de sus canciones. El registro de voz de Maika Makovski es digno de estudio, y puso los pelos como escarpias a más de uno del público. El concierto terminó tan intenso como empezó, tanto que al final el sonido de los baleares arrancó de las sillas a todo el público que bailó las dos últimas canciones. Las comparaciones son odiosas, pero la de Maika Makovski con Pj Harvey es casi inevitable. Aunque eso sí que los yankies se queden con Pj Harvey que no la cambió por Maika ni por todo el oro del mundo. Cómo nota negativa está la escasa hora de concierto, que dejó con ganas de más al público, ya que con 3 discos a sus espaldas tenía cuerda para rato, además se dejo muchas canciones de los dos discos anteriores.

Depedro
Si Maika Makovski nos había dejado con la boca abierta, llego DePedro, alter ego, y nos dejo con una sonrisa de lado a lado de la boca. Más sólo que de costumbre, con sólo un compañero a la guitarra/teclados/celemín/piano/pedaleras, el señor Lucas…, al que presentó como la banda. Supo conjugar muy bien las canciones de su último disco ‘’Nubes de papel’’ con las del ya prestigioso primer disco ‘’La memoria’’. Y se nota que la propuesta de Depedro tiene tirón, una Caja Blanca con muy buena entrada coreaba y palmeaba todas las canciones de Depedro. Destacaron algunas canciones del segundo disco como ‘’Diciembre’’ o ‘’Tu mediodia’’ coreadas con entusiasmo por el respetable. Del músico madrileño solo salió energía, y buen rollo, en el mejor sentido. Jairo Zavala conectó desde el primer momento con el público y se mostro muy amable, alabando la ciudad a la que decía tenía ganas de venir desde hace tiempo, y promete una próxima visita. También alabó la propuesta del Wild Winter, y contó alguna que otra anécdota graciosa sobre las canciones del disco. Un concierto in crescendo en el que se ventiló casi todas las canciones de los dos discos y que terminó con un poderosísimo ‘’Comanche’’.

Ilegales
Cita obligada la del sábado en la Sala Vivero, los Ilegales, unos veteranos de los escenarios se retiran y se daban un último garbeo por Málaga antes de pasar a ser Jorge Ilegal y Los Magníficos. Una Sala Vivero abarrotada, en la que había más de uno que peinaba ya muchas canas, y es que tras 20 años en los escenarios los Ilegales han ido dejando una masa de incondicionales por la geografía española. Sonaron todos los clásicos de los Ilegales ‘’Fiesta’’ ‘’Hola,mamoncete’’… , todos interpretados con mucha garra, tanta que tanto el bajo como la guitarra sufrieron algunos percances fruto de la pasión de los instrumentistas. En definitiva, el sábado pasaba por Málaga una parte importante de la historia del rock español. Y sobre todo pasaba una figura, la de Jorge Ilegal, única en la escena musical española. Jorge Martinez, un animal de escenario que con su calvorota, sus chistes y su voz cavernosa convirtió el concierto en un show impagable. ‘’Nosotros no le cantamos canciones a Cadillac solitarios, no somos tan ingenuos ’’, ’’cualquier jilipoyas puede tocar bien la guitarra, si no miradme a mi’’ ‘’que se jodan los pingüinos si tienen frío por pinguinos’’ o un solo virtuoso de MIAUS fueron algunas de las perlas que Jorge dejó para la posteridad.